Textos bíblicos: Isaías 2.1-3,5
Isaías tenía un don, él veía el futuro del pueblo. Dios le permitía mirar esto para advertir a las personas y salvarlas. Algunas personas le creían y muchas otras no, de hecho se burlaban de él y no le querían. Esta fue una de las tantas profecías de Isaías.
Escúchalo y responde esta pregunta:
¿Te gustaría tener este don? ¿Por qué sí o por qué no?
Mientras escuchas, puedes seguir esta lectura con el libro «Siempre conmigo 365»