spot_img

Cena con el Señor

Compártelo:

«Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí.» (Lucas 22.19)

Cena con el Señor
Imagen provista por unsplash.com/@sugercoatit

Eran instantes de tensión y ansiedad. Los discípulos advertían que algo estaba por ocurrir, aunque no lograban comprender todo lo que escuchaban y veían.

Aunque eran personas con defectos, como todos, había en ellos un corazón dispuesto que se manifestaba en la pasión que ponían en cada experiencia compartida.

Pronto Jesús sería capturado, torturado y clavado en una cruz. ¡Había llegado el momento para comer con sus discípulos la última cena!

Entonces, Jesús tomó el pan y el vino en sus manos, le dio gracias a Dios por ellos, y antes de compartirlos con sus seguidores les enseñó algo que jamás olvidarían: ¡su plan de salvación para toda la humanidad!

A lo largo de la historia, quienes creemos en Jesús como Dios y Salvador hemos recordado aquel encuentro haciendo lo mismo en nuestras reuniones. De esta manera, al compartir el pan y el vino en la celebración que solemos llamar «Cena del Señor», recordamos lo que él hizo en la cruz por nosotros.

Quienes hemos visto la película «La Pasión del Cristo», dirigida por Mel Gibson, pudimos darnos una idea de lo que le costó a Jesús concedernos el perdón de los pecados y la limpieza de nuestra alma. ¡Sufrió muchísimo en la cruz para mostrarnos su amor!

Pensemos en ello cada vez que compartamos el pan y el vino con los hermanos en la congregación.

Sumérgete: La muerte de Jesús provoca tristeza y dolor, pero no había otra manera de darnos la posibilidad de recibir el perdón. Él murió, pero al tercer día venció a la muerte: ¡resucitó!

.

━ Popular

140 Todo tiene su tiempo

¿Te imaginas lavarte los dientes y comer a la vez? Creo que no va a funcionar. Es por eso que este capítulo nos recuerda que existe un momento para todo.

299 Todas las cosas eran de todos

El Señor seguía haciendo que su pueblo crea en él y sean salvos, las personas estaban llenas del Espíritu Santo y daban todo lo que tenían.

Como disipar el desánimo

Servir al Señor nos presenta una vida excitante. Sin embargo, hay veces en las que nos sentimos desanimados, sin fuerzas para continuar.

Abuelos

«Oye a tu padre, a aquel que te engendró; y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies.» (Proverbios 23.22) Cada tarde, los ancianos ocupaban las...

Misericordia

Tener misericordia es mucho más que palabras, debe demostrarse con acciones siguiendo el ejemplo de nuestro Creador.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí