«Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.» (Efesios 5.17)

Hay personas que aseguran haber escuchado la voz de Dios. Otras afirman que, mediante distintos hechos y circunstancias, comprendieron queel Señorles encomendaba una tarea específica. En todos los casos, coinciden en admitir que no les resultó sencillo hacer lo que se les pedía, pero que una vez que lo hicieron experimentaron la victoria.
¿Cómo saber lo que Dios desea para nuestra vida? ¿Será posible distinguir su voluntad entre tantas voces, distracciones, pensamientos y emociones?
- Primero, debemos elegir un momento del día en el que podamos pensar con tranquilidad. Nos ayudará a concentrarnos y reflexionarmejor. Tomemos papel y lápiz, la computadora o algún dispositivo electrónico y escribamos lo que pensamos que Dios nos está diciendo.
- Segundo,comparemos los pensamientos que anotamos con lo que enseña la Biblia. ¿Por qué? Pues porque Dios jamás nos llevaría a hacer algo que no esté de acuerdo con lo que dice su Palabra. Si tal comparación resulta en algo opuesto a ella, entonces sabremos que solo se trata de ideas o deseos de nuestra propia naturaleza, y no de Dios.
Es muy sabio, además, buscar el consejode otras personas que sigan a Jesús y estudien lo que enseña la Biblia. ¡Sin duda podrán orientarnos en nuestra decisión!
¡Dios está a nuestro lado y nos ayuda a conocer su voluntad! ¡Distingamos su voz y hagámosle caso en todo lo que nos pida!
Sumérgete:Leamos la Biblia todos los días y aprendamos sus enseñanzas. Cada vez que la estudiemos tendremos la posibilidad de escuchar la voz de Dios y recibir sus instrucciones para nuestra vida